miércoles, 10 de octubre de 2012

Veinte siglos después


Domingo XXVIII, Tiempo Ordinario, ciclo B
Sabiduría 7,7-11    Hebreos 4,12-13    Marcos 10,17-30

¿Qué debemos hacer?
El autor del libro de Job presenta la situación inhumana de los pobres,
que son oprimidos y despojados de sus bienes por los ricos malvados.
Los malvados: -Cambian los linderos y apacientan ovejas robadas…
-Despojan de sus animales a los huérfanos y a las viudas…
-Apartan del camino a los pobres y los miserables se esconden…
-Arrancan del pecho de las viudas a sus hijos recién nacidos…
-Dan como garantía al hijo del pobre… (Job 24, cf. Eclo 34,18-22).
Los pobres: -Madrugan para buscar trabajo y pan para sus hijos…
-Pasan la noche desnudos, sin manto para protegerse del frío…
-Empapados por las lluvias se refugian en las rocas…
-Como animales de carga transportan el trigo y pasan hambre…
-Los moribundos gimen en la ciudad y los heridos piden socorro…
¿Algún día esos ricos malvados se convertirán y pedirán perdón?
¿Comprenderán que la Sabiduría vale más que el oro y la plata?
En pleno siglo XXI, la economía del mercado, la explotaciCn irracional,
la industrializaciCn salvaje y descontrolada… -Dejan destrucción,
e incluso muerte, en nuestra regiCn de América Latina y el Caribe…
-Privilegian el desmedido afán por la riqueza, por encima de la vida
de los personas y de los pueblos, y del respeto de la naturaleza…
-Con actitud egoísta destruyen nuestros bosques y la biodiversidad…
-Ponen en peligro la vida de millones de campesinos e indígenas,
 que son expulsados para vivir miserablemente en las ciudades…
-Contaminan el agua y el medio ambiente con desechos químicos….
-Convierten las zonas explotadas en inmensos desiertos (DA, n.473).
Pero, todos estos problemas se dan en países que se llaman católicos,
con Partidos políticos cristianos y Asociaciones patronales católicas.
Si sus miembros preguntaran: Maestro bueno, ¿qué debemos hacer?
Jesús volvería a decir: No mates… No cometas adulterio… No robes…
No mientas… No seas injusto… Honra a tu padre y a tu madre…
¿Ellos podrán responder: Maestro, todo eso lo estamos cumpliendo?

Seguir a Jesús pobre entre los pobres
Gracias al camino abierto por hermanos nuestros en la fe cristiana,
son muchísimos los que están comprometidos con los pobres, incluso
derramando su sangre por hacer realidad un mundo más fraterno.
*El Papa Juan XXIII (el 11 de sept. de 1962) y el Cardenal Lercaro
(el 6 de dic. 1962) hicieron hincapié sobre: La Iglesia de los pobres.
*El doc. de Medellín (1968) al hablar sobre: La pobreza de la Iglesia,
distingue:  -la pobreza como carencia de bienes que es un mal,
-la pobreza espiritual que es el tema de los pobres de Yavé, y
-la pobreza como compromiso que asume la condición de los pobres.
*En el doc. de Puebla (1979) se habla de la Opción preferencial
por los pobres y del potencial evangelizador de los pobres.
*Al inaugurar la IV Conferencia Episcopal de Santo Domingo (1992),
el Papa Juan Pablo II dijo: La Iglesia reafirma la opción preferencial
en favor de los pobres. Una opción no exclusiva ni excluyente
*El Papa Benedicto XVI en Aparecida (el año 2007), dijo: La opción 
preferencial por los pobres está implícito en la fe cristológica.
Sin embargo, como dijeron nuestros Obispos en Medellín: La Iglesia
experimenta la urgencia de traducir ese espíritu de pobreza en gestos,
actitudes y normas que la hagan un signo más lúcido y auténtico de
su Señor. La pobreza de tantos hermanos clama justicia, solidaridad, 
testimonio, compromiso, esfuerzo… Y, para ser consecuentes, añaden:
*Deseamos que nuestra habitación y estilo de vida sean modestos;
nuestro vestir, sencillo; nuestras obras e instituciones, funcionales
*Deseamos renunciar a títulos honoríficos propios de otra época…
*Con la ayuda del Pueblo de Dios esperamos superar el sistema
arancelario, reemplazándolo por otras formas de cooperación
económica, desligadas de la administración de los sacramentos…
*Alentamos a los que se sienten llamados a compartir la suerte
de los pobres, viviendo con ellos y aun trabajando con sus manos
*Queremos que nuestra Iglesia latinoamericana esté libre:
de ataduras temporales, de complicidad y de prestigio ambiguo…
*Así la Iglesia, continuadora de la obra de Cristo, presentará ante
el mundo signo claro e inequívoco de la pobreza de su Señor
Veinte siglos después, Jesús nos sigue interpelando y nos dice:
Anda, vende lo que tienes… Reparte el dinero a los pobres… 
Después, sígueme ¿Nos iremos tristes, porque somos ricos?
J. Castillo A.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu comentario puede ayudar a mejorar este blog