Bautismo de Jesús, ciclo C
Is 40,1-5. 9-11 - Tito
2,11-3,7 - Lc 3,15-16. 21-22
En el Evangelio de hoy, hay dos Buenas Noticias sobre Jesús:
*La primera Buena Noticia la hace el
profeta Juan cuando dice:
Viene
uno y Él les bautizará con Espíritu Santo y fuego.
*Luego, mientras Jesús es bautizado,
ora, y el Espíritu Santo
desciende sobre Él, y una voz le dice: Tú eres mi Hijo amado.
*Y nosotros, ¿qué testimonio damos de
nuestro bautismo?
Él
les bautizará con el Espíritu Santo y fuego
La misión del profeta Juan es preparar la
venida de Jesús.
Para
ello, Juan recorre la región del río
Jordán y predica
un bautismo de arrepentimiento para el
perdón de los pecados.
Y
como todos se preguntaban si Juan no
sería el Mesías,
el
profeta del desierto responde diciendo: yo les bautizo con agua…
Y,
al mismo tiempo, les exige dar frutos de una sincera conversión:
compartir el pan con el hambriento…
vestir al que está desnudo…
cobrar lo justo… no maltratar ni hacer
denuncias falsas…
(Lc 3,7ss).
A
continuación, Juan anuncia: Viene uno con
más autoridad que yo.
Él
les bautizará con el Espíritu Santo y fuego (Lc 3,16). Ciertamente,
el
agua lava… el fuego purifica… el Espíritu transforma, santifica…
*La acción del Espíritu Santo está
presente en la vida de Jesús:
-El
Espíritu Santo desciende sobre Él mientras se bautiza (Lc 3,22).
-Jesús
se deja llevar por el Espíritu Santo al desierto (Lc 4,1).
-Impulsado
por el Espíritu Santo, Jesús vuelve a Galilea (Lc 4,14).
-Con
la alegría del Espíritu Santo, Jesús alaba al Padre (Lc 10,21)…
Antes de su Ascensión, Jesús dice a sus
discípulos: Juan bautizó con
agua, pero ustedes serán bautizados con
el Espíritu Santo
(Hch 1,5).
Por su parte, S. Pablo escribe: Todos nosotros hemos sido bautizados
en un solo Espíritu para formar un solo
cuerpo
(1Cor 12,13).
*Sobre el fuego, Jesús dice: He
venido a prender fuego en la tierra,
y, ¡cómo desearía que ya estuviera
ardiendo! Tengo que pasar por un bautismo,
y ¡qué angustia siento hasta que se cumpla (Lc 12,49s).
Tú
eres mi Hijo amado, el predilecto
Jesús siendo igual a Dios, se humilla, se
hace servidor (Flp 2,6-11),
vive
pobre entre los pobres, y se bautiza con el pueblo como uno más.
Mientras
se
bautiza… Jesús ora… el
Espíritu Santo baja sobre Él…
y
una voz del cielo anuncia: Tú eres mi hijo amado, el predilecto…
Al
respecto, tengamos presente lo que dijo Juan Pablo II, en 1994:
La
Iglesia siente cada vez más fuerte el impulso del Espíritu Santo
a
ser pobre entre los pobres, a recordar a
todos la necesidad
de conformarse con el ideal de pobreza
predicada y practicada
por Cristo, y a imitarlo en su amor
sincero y concreto a los pobres.
Para
construir una sociedad humana, justa y fraterna, oigamos
a
Jesús, el Hijo amado, que nos revela el verdadero rostro de Dios:
-Amen a sus enemigos, oren por sus
perseguidores. Así serán hijos
del
Padre de ustedes, que hace salir
el sol sobre malos y buenos,
y hace caer la lluvia sobre justos y
pecadores.
-Miren las aves del cielo: no siembran ni cosechan, sin embargo,
el Padre del cielo las alimenta. ¿No
valen ustedes más que ellas?
-Sean misericordiosos como es misericordioso el Padre de ustedes.
Llamados
a dar testimonio de nuestro bautismo
¿Cómo se explica que en países de
tradición católica, como el Perú,
tengamos:
injusticia, corrupción, violencia, narcotráfico, etc.?
Muchas
cosas cambiarían en nuestra sociedad, si los cristianos nos
esforcemos
en vivir
nuestro bautismo como un nuevo nacimiento,
amando
a Dios y a nuestro prójimo. Este es el camino que nos lleva a:
-ser,
de veras, oyentes y servidores de la Palabra de Dios…
-dar
testimonio de nuestro bautismo con palabras y obras…
-ayudar
a la gente sencilla a ver, oír, reflexionar, hablar, actuar…
-leer
e interpretar los signos de los tiempos…
-crear
una corriente de opinión inspirada en el Evangelio…
-proponer
los valores del Reino como base de proyectos sociales…
-dar
testimonio de Jesús, como lo hace el profeta Juan: Ahora mi
alegría es grande, que Él crezca y yo
disminuya
(Jn 3,22ss).
Todos
los bautizados estamos llamados a hacer realidad esta misión,
pues:
La juventud no es solo la falta de
arrugas y de canas.
La vejez no es solo la edad avanzada.
Bien saben ustedes que ser joven es tener una causa
a la que consagrar la propia vida (Dom Helder
Camara, 1968).
J. Castillo A.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu comentario puede ayudar a mejorar este blog